35 cosas de las que no te avisaron antes de ser padre
Consejos

35 cosas de las que no te avisaron antes de ser padre

Por mucho que uno se prepare, nada te prepara para ser padre. Por mucho que te hayan contado amigos y familiares. Por mucho que vivamos en la era de la información y tengas a tu alcance la experiencia de miles de personas y expertos. Por mucho que vivas el día a día de otros padres a través de las redes sociales.

Con toda esa información, uno se hace una idea en la cabeza de lo que es ser padre, y luego la realidad le da a uno un cariñoso revolcón. Así que cual guía del autoestopista paterno, estas son 35 cosas de las que no te avisaron antes de ser padre (o no quisiste enterarte cuando te las dijeron).

  • Que ibas a desear con tanta fuerza que alguien cuidara un rato de tu bebé para descansar, y echarlo de menos en cuanto se lo llevan.
  • Que ibas a pasarte una hora durmiendo a un bebé para que se despierte a los 10 minutos.
  • Que tras dormir esos 10 minutos de siesta, el bebé se despertaría con la energía de haber dormido una noche entera.
  • Que no ibas a tener más tema de conversación que si tu bebé come, caga o duerme bien. Aunque con el tiempo se amplía a si gatea, si anda o si dice “gugu tata”.
  • Que se te iban a acumular las series en Netflix, porque te ibas dormir con el mando en la mano
  • Que cuando te dijeran de ir a cenar a las 10, te parecería “de madrugada”.
  • Que las recomendaciones de Youtube de tu iPad iban a estar invadidas por mil variantes de Johnny Johnny Yes Papa.
  • Que te ibas a aprender mil canciones de cuna, pero que a tu bebé le iba a gustar dormirse con Rocío Durcal (esto es verídico).
  • Que la ropa de bebé es absurdamente cara para lo poco que dura y la poca tela que lleva.
Bebe Dormido
Que cuando el bebe se durmiera ibas a sentir tanto júbilo, aunque en silencio, por si se despierta
  • Que aunque fueras al centro comercial a comprarte unos pantalones, volverías a casa con ropa para el bebé.
  • Que la ropa de bebé iba a ocupar tanto sitio en el armario siendo tan pequeña.
  • Que no ibas a tener dónde guardar la ropa que se le ha quedado pequeña “por si buscáis el segundo”.
  • Que ibas a tener la cocina invadida de esterilizadores y mini-robots de cocina y la nevera y el congelador lleno de comida del bebé en vez de cerveza.
  • Que ibas a cocinar más para tu bebé que para ti.
  • Que tus amigos sin hijos no iban a entender que lo único que quieres es dormir.
  • Que nunca ibas a tener claro si le has abrigado demasiado o demasiado poco, si tiene calor o frío.
  • Que fueras capaz de llevar tanto peso encima tanto tiempo ¡y con una sonrisa!
  • Que ibas a sentir tanto miedo y tanta alegría al mismo tiempo.
  • Que aunque el peque haya pasado una mala noche y no hayas dormido ni dos horas seguidas, su sonrisa al verte haría que todo mereciera la pena.
Bebe Jugando
Que aunque tuviera el comedor lleno de juguetes, iba a querer jugar a abrir cajones
  • Que tu camiseta preferida nunca estaría limpia porque la ropa del peque tiene prioridad en la lavadora.
  • Que tu bebé iba a ir mejor vestido que tú.
  • Que no iba a usar la mitad de los cacharros o juguetes que le compraras.
  • Que le regalasen lo que regalasen a tu bebé, siempre sentirá más fascinación por la caja.
  • Que el salón iba a ser invadido por un ejército de juguetes de colores chillones que echarían a perder el Feng Shui.
  • Que ibas a ser capaz de reconocer el llanto de tu bebé desde la otra punta de Ikea.
  • Que cuando por fin salieras un día a tomar algo, te emborracharías con el primer sorbo del gin tonic.
  • Que en el maletero del coche solo te iba a caber el carro del bebé, por muy compacto y plegable que lo compraras.
  • Que te iba a resultar de lo más natural oler un culo a ver si tiene caca.
  • Que la primera vez que se pusiera malito, aunque fuera solo un catarro, ibas a sufrir de ver sus caritas y de no saber si ir a urgencias porque ha tosido.
  • Que te ibas a gastar casi mil euros en un cochecito que has usado 6 meses (porque luego querrás uno de tijera que te quepa en el maletero).
  • Que ibas a paladear cada segundo de cada siesta que tu bebé te regale.
  • Que ibas a llegar tarde a los sitios porque todas las abuelas del barrio se iban a parar a decirle algo al bebé.
  • Que ibas a ser tan feliz.

En Bebés y más | Siete consejos para tu primer año de paternidad, de un padre ex-primerizo, Las 13 cosas que dije que no haría como padre, y ahora mírame, Las 13 discusiones cotidianas que tendrás con tu pareja cuando seas padre

Temas
Comentarios cerrados
Inicio