Así como los vemos tan monos adornando la habitación de los peques, los peluches juntan mucho polvo y se convierten en un nido de ácaros, unos microscópicos parásitos a los que les encanta la ropa de cama, los sofás, los colchones, las almohadas, y también los peluches. Algo nada deseable, especialmente si tenemos niños alérgicos.
Por tanto, deberemos lavarlos con cierta frecuencia para mantenerlos limpios y libres de gérmenes. Pero, ¿cómo conseguir que además de limpios y desinfectados, no se estropeen, ni se apelmacen y queden como nuevos?
¿Puedo lavarlos en la lavadora?
Es la opción más práctica y socorrida, y la mayoría de peluches pueden lavarse en la lavadora sin problema, siempre que el tamaño lo permita. Pero no todos los peluches pueden meterse en la lavadora, y algunos tendremos que lavarlos a mano. Revisa antes la etiqueta de cuidado, si es que la tiene, para comprobarlo. También comprueba que no tenga rotos ni partes descosidas, que habrá que arreglar antes de lavarlo para que no pierda el relleno.
Lavado a máquina
- Si tiene manchas, pulverízalas con un quitamanchas antes de meterlos en la lavadora o rocíalos con un desinfectante para textiles.
- Mete los peluches dentro de una funda de lavado, o si no la tienes puede servir una funda de almohada. Así quedarán más protegidos. Evita meterlos con otras prendas muy sucias o que puedan desteñir.
- Usa un detergente para prendas delicadas y pon un programa de lavado corto (o para prendas delicadas), a baja temperatura (máximo 30º). Sin centrifugado.
- Al sacarlos, escúrrelos en una toalla y cuélgalos a secar al aire libre.
Limpieza en seco en casa
Para los peluches que no son aptos para lavadora, porque tienen mecanismos eléctricos o baterías, o por su tamaño, puedes probar esta limpieza en seco.
- Comienza por rociar el peluche con un pulverizador con agua.
- Mételo en una bolsa de plástico y añade un buen puñado de bicarbonato de sodio.
- Cierra bien la bolsa y sacúdela enérgicamente durante un par de minutos para que el bicarbonato llegue a todas las partes.
- Déjalo actuar durante varias horas (de la noche a la mañana siguiente, por ejemplo)
- Retíralo de la bolsa y cepilla el peluche con un cepillo suave para quitar el exceso de bicarbonato. Quedará como nuevo.
¿Cada cuánto lavar los peluches?
La frecuencia recomendada dependerá del uso que se le dé al peluche. Normalmente, con lavarlos una vez al mes es suficiente, pero si tu hijo lo usa para dormir, o es su objeto de apego que lleva a todas partes, será necesario lavarlo con más frecuencia, como una vez a la semana.
De lo contrario, si el peluche no está muy sucio y solo ha acumulado algo de polvo, puedes limpiarlo con un trapo humedecido en alcohol de limpieza, o bien pasarle una aspiradora con boquilla pequeña o mejor, una aspiradora de vapor.
Si tiene una mancha puntual, pero está limpio, puedes quitarla frotando con un paño humedecido en agua tibia. Si usas jabón, utiliza una muy pequeña cantidad pues luego será más difícil quitar la espuma.
Con estos consejos, vuestros hijos podrán seguir disfrutando de sus peluches favoritos limpios y desinfectados, como si fueran siempre nuevos.