Mi hijo no se siente seguro conmigo

Mi hijo no se siente seguro conmigo
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Cuando a uno le dicen que va a ser padre, pero no en una conversación cualquiera en el bar no, si no cuando te lo dicen con el predictor en la mano y estrellitas en los ojos, tu instinto de protección, ese que lleva enterrado todo tu vida, se levanta de un brinco y preparado para la acción: Dispuesto a cambiar este mundo y dieciocho más si hiciera falta para que tu hijo se sienta seguro.

A partir de ese momento, y según cuentan, hasta el último día de tu vida ese es uno de tus objetivos principales. ¿Pero qué pasa cuando mi hijo no se siente seguro conmigo?

¿Qué pasa cuando las cosas no van cómo uno espera?

En el fondo de tu subconsciente tienes grabada a fuego la relación con tus padres e idealizada la que quieres con tus hijos y cuando la realidad te escupe en la cara o sale corriendo de entre tus brazos hay algo en tu interior que ruge y te desgarra. Piensas que es lo que todos llaman "mamitis", pero no es así. Él no tiene problema con estar contigo en vez de con su madre, de hecho con ella pasa lo mismo. Te preguntas qué has hecho mal, ¿por qué no confía en ti? La respuesta la desconoces, y por muchas vueltas que le des, para la mayoría de nosotros es muy complicado llegar a ella.

Estos días sin ir más lejos no consiente que te acerques a él cuando está dentro de la piscina y si te deja cogerle le notas en completa tensión. Por supuesto ni se te ocurra hacerle ninguna broma. Es un niño muy fantasioso y eso le hace también muy miedoso y difícil de convencer de que no hay peligro cuando su imaginación le dicta todo lo contrario.

¿Es normal?

¿Serán imaginaciones mías y todo es normal? ¿Me estoy obsesionando con todo esto? ¿Pido demasiado y quizás soy yo el que busca que él me necesite?

En algún punto del desarrollo de nuestros hijos, el miedo hacia algunas cosas va a ser mucho más fuerte que la confianza en nosotros. Normalmente son etapas que van pasando y tarde o temprano se vuelven a sentir seguros a nuestro lado. En algunos casos esto puede ser un problema, pero esa parte la dejo mejor en manos de un psicólogo infantil.

¿Qué puedo hacer?

Pues tener paciencia, que no es que de mucho ánimo pero al final es lo que funciona mejor. No atosigar al niño intentando que confíe en vosotros porque al final se sentirá presionado y más perdido aún. Lo mejor, en caso de que pueda hacerlo, es hablar con él y que intente expresar lo que siente para así poder comprenderle mejor y poder ayudarle. Hacerle saber que siempre estaremos ahí cuando nos necesite, que se tome su tiempo. (Y esto me lo voy a aplicar porque estoy pasando por ello).

Deberíamos dejar de idealizar tanto la paternidad y pensar que como muchos otros procesos de desarrollo y aprendizaje, nunca es perfecta y siempre habrá zanjas que atravesar en nuestro camino. Y tener presente que no siempre nuestro hijo se sentirá seguro con nosotros.

Foto | redjar en Flickr En Bebés y más | Mi bebé: padece mamitis aguda, De repente tiene miedo a muchas cosas que antes no le asustaban

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