Hemos leído en una noticia de Ecuador que aconseja embarazos de 12 meses, en principio es muy acertado, ya que de lo que se trata es de reducir la mortalidad infantil en ese país. La idea es dedicar un periodo de tres meses a evaluar la salud de la pareja antes del embarazo y preparar la salud de la madre para que el embrión tenga todo lo necesario y se desarrolle adecuadamente.
Con esta medida preventiva se consigue disminuir la morbilidad, se disminuyen los posibles riesgos de que el bebé sufra algún tipo de malformación o alguna enfermedad congénita. Para ello, estas pruebas se realizan dentro de los tres meses anteriores a la concepción con exámenes generales, pruebas inmunológicas, etc.
Sería algo positivo plantear este tipo de medidas en otros países, ya que garantizarían mejores condiciones para el desarrollo del feto. De hecho, cada día son más las mujeres que planifican su embarazo y que se preparan concienzudamente por su cuenta en pro de la futura vida de su hijo.
Si se difundiera una campaña con una acertada planificación antes del embarazo, seguramente se conseguirían reducir esos datos de las estadísticas españolas que indican cuantos son los embarazos que no han llegado a buen término. Una buena planificación del embarazo equivale a un mayor éxito y unas condiciones de salud más óptimas tanto para la futura mamá como para el bebé.
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