Cuando nació mi pequeña a fines del verano, a pesar de que todavía hacía calor, estaba prohibido encender el aire acondicionado de la habitación del hospital para que no se resfriara.
Igualmente, durante los primeros días estornudaba con frecuencia y le caían algunos mocos aguados.
Ante mi temor de que hubiera pescado un resfriado tan chiquita, lo consulté con el pediatra y me dijo que es muy común que los bebés nacidos presenten un moqueo e incluso estornudos durante las primeras semanas.
No responde a ninguna enfermedad ni alergia, sino que la razón es que el bebé elimina las sustancias que se han ido acumulando en las vías altas durante el embarazo. Suele llamarse "rinitis del recién nacido".
Las vías de sus narices son muy estrechas y cualquier fluido nasal puede hacer que respiren con ruido, o parecer congestionados aunque realmente no tengan ningún resfriado.
Consúltalo igualmente con el pediatra, que si fuera necesario te dirá como limpiarle la nariz con suero fisiológico y una perita, aunque en la mayoría de los casos los propios estornudos son la forma natural que tiene el bebé de eliminar las mucosidades.
De todas maneras, aunque nazcan en verano, es aconsejable que los bebés de apenas días lleven calcetines de hilo, una ranita que cubra sus piernas y una ropita de algodón liviana, pero de manga larga, sobretodo si la maternidad tiene sistema de aire acondicionado central, que además hay que taparlo siempre para dormir aunque sea apenas con una sabanita y una manta liviana.
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