Acaban de aprobar en México una ley por la cual prohíben a los empresarios solicitar a las mujeres que quieren acceder a un puesto de trabajo en sus empresas, un certificado médico en el que se refleje que no existe embarazo.
Hasta ahora esta era una práctica habitual y requisito indispensable para poder contratar a una mujer, realmente es algo indignante y descaradamente discriminativo.
La modificación del artículo 133 de la Ley Federal del Trabajo también refleja que una mujer no podrá ser despedida por estar embarazada. En México ha aumentado la participación de la mujer en el mercado laboral entre un 21 y un 39%, pero la ley de igualdad no está instaurada. Aunque ya sabemos, por experiencia en nuestro país, que aunque la ley tome medidas, todavía se escapan muchos casos de discriminación de género.
Nos alegra esta noticia, esperemos que los empresarios no tarden mucho en hacerse a la idea y que reconozcan que las mujeres y también las madres, por supuesto, son tan válidas como cualquier hombre para desempeñar un trabajo. Quizá es necesaria una mayor implicación de los padres mexicanos en la educación de sus hijos, ¿alguien nos lo puede decir?
Vía | El Financiero